La séptima función del lenguaje
Laurent Binot (2015)
Seix Barral
Edición en castellano 2016
Roland
Barthes ha sido asesinado. Su muerte, a diferencia de lo que nos dice la
historia, no fue un accidente; forma parte de una guerra descarnada que
involucra a un grupo de seres humanos crueles, inescrupulosos y traicioneros como
jamás los ha parido alguna vez la evolución: son los filósofos, lingüistas y
semiólogos. Ellos están en guerra todos contra todos y, como ya sabemos, no hay
nada peor que un intelectual peleando por lo que cree que es lo correcto, por lo
que sostiene ser la verdad: su verdad.
Y esta
guerra tiene un objetivo… o mejor dicho, un objeto de valor: la séptima función
del lenguaje. Una arma, una técnica, una bomba capaz de hacer que Michelangelo
Antonioni y Phillipe Sollers sean dolorosamente mutilados, que Julia Kristeva
sea en realidad una despiadada y ambiciosa doble (¡triple!) espía, que Judith
Butler use sus teorías de género para facilitarle las cosas a “ciertos”
servicios secretos, que Louis Althusser haya asesinado a su esposa porque esta traicionó a la “causa semiótica”, que Michel
Foucault ponga a disposición de Barthes a sus “mancebos”, a quienes obviamente
entrena para que escondan tras sus disfraces de gigolós unas habilidades
filosóficas inauditas… y, finalmente, que lo de John Searle y Jacques Derrida no
sea solo una batalla intelectual sino que los lleve a matarse mutuamente por no
soltar aquel valioso secreto.
Esta
herramienta del lenguaje es tan poderosa que podría hacer que Miterrand sea
imbatible en el debate presidencial televisado de 1981 y le gane las elecciones a
Giscard, que Umberto Eco se convierta en un intelectual irrefutable
y que Simon Herzog sobreviva, dios sabrá cómo, hasta nuestros días para contarnos
toda esta historia en una novela, a manera de policial narrado en tercera
persona por un detective (Jaques Bayard) de ultraderecha, bruto y achorado como
él solo y como varios que conocemos por el mundo —énfasis en Perú—.
“La
séptima función del lenguaje” (2015) es una novela policial escrita por Laurent
Binot, autor de la críptica “HHhH”, y es quien le da voz a Herzog… y sospechamos
que en cualquier momento Kristeva y Sollers deben lo mandarán a matar o castrar
por haber revelado la verdadera identidad de los pensadores del mundo: asesinos
manipuladores hambrientos de poder. Ninguno se salva. Y sbaer todo esto, por
supuesto, nos ayuda a entender muchas cosas en todas partes del mundo, pues ¿no
son los intelectuales los seres más argolleros, déspotas y traicioneros —los
unos contra los otros— que podamos conocer?
Hay
quienes dicen que esta novela mezcla hechos reales con ficticios pero no: lo
que hace es relatarnos los hechos que no conocemos (y que, por lo tanto, no
podemos decir que no sucedieron) para explicarnos el verdadero motivo de los
que son del dominio público.
Mucho
cuidado. La próxima vez que nos crucemos con un(a) filósofx, lingüista o semiólogx
(si no hacemos la mención a la diversidad con la “x”, probablemente Judith
Butler nos corte el pescuezo con una abrecartas): miremos hacia nuestro
alrededor, vigilemos la retaguardia, no les demos la mano, cuidémonos de los
paraguas, mucho menos les aceptemos un trago o un bocadillo de nada. Y, sobre
todo, nunca, pero NUNCA prestemos atención a lo que tengan que decirnos porque,
Eco no quiera, podrían estar utilizando contra nosotros la fulminante séptima función
del lenguaje.
Laurent Binet (AFP). |
Entrevista al autor sobre su novela aquí.
Y un regalito aquí.
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